Luciano Guerra, basquetbolista surgido en Bochas Sport Club de Colonia Caroya, vive uno de los momentos más importantes de su carrera: está disputando las finales de la Liga Nacional con Instituto de Córdoba frente a Boca Juniors.
“Estoy muy contento, esto es algo que quiero desde chico, desde que empecé a jugar la Liga”, expresó en diálogo con Radio Jesús María. El escolta se mostró entusiasmado y confiado de cara a la serie: “El equipo está completo, físicamente entero, y venimos trabajando muy bien. Sabemos que Boca es un rival durísimo, pero estamos enfocados”.
Guerra, que llegó con el plantel de Instituto a Buenos Aires para disputar los primeros dos partidos, destacó la importancia del momento y el sueño de poder consagrarse campeón con la Gloria. “Tenemos muchísimas ganas, muchas expectativas y estoy feliz de estar viviendo estas finales”, agregó.
Pero además del presente profesional, el jugador mantiene un fuerte vínculo con Colonia Caroya y su club de formación. “Estuve el fin de semana allá viendo a mi hermano que juega en Bochas, y aproveché para ponerme al día con José (Nou). Me pone muy contento que Jere (Musina) haya quedado al frente del proyecto, es alguien que trabaja con mucha pasión”, contó.
Guerra valoró el crecimiento deportivo del club y el talento de los jóvenes que lo integran: “Cada vez que voy noto que el nivel es más alto. Los proyectos están yendo muy bien, aunque el que está todos los días quizás no lo note. Yo lo veo desde afuera y el avance es enorme”.
Finalizada la temporada de Liga Nacional, Luciano adelantó que regresará a Caroya por un tiempo: “Siempre que vuelvo entreno en el club, me reciben con las puertas abiertas. Así que cuando termine acá, voy a estar un poco más presente y acompañando”.