Alumnos de cuarto, quinto y sexto grado presentaron los resultados de un trabajo que comenzó el año pasado. Conocer las aves y sus ambientes fue el objetivo que unió a diferentes actores de la comunidad.
La abuela de un estudiante propuso a las docentes plantear esta temática y desde allí comenzaron a sumarse colaboradores. Un cuento grabado oralmente, una obra de teatro y un mural fueron los resultados del proyecto.
Un papá ayudó en la redacción de un cuento, uno filmó la puesta en escena y otro, actuó como el brujo malvado de la historia. La escritora Analía Juan corrigió el texto, el fotógrafo de naturaleza Ezequiel Vivas disertó sobre la fauna, Ana Badía plasmó el diseño en la pared y la municipalidad donó la pintura para el mural.
La directora del centro educativo, Leticia Vilchez contó que la iniciativa también incluyó la labor sobre las emociones de los chicos. «Se fueron dando cuenta que entrampar un pájaro no solo tenía que ver con ese pájaro sino con toda su familia, con sus pichones», narró.
«Cambiar el mundo tiene que ver con ese mundo chiquitito de la casa, de la familia, de la escuela y la comunidad», resumió.