La localidad del norte cordobés viene reclamando desde hace tiempo los inconvenientes con las comunicaciones al depender de la energía eléctrica exclusivamente.
«Si se nos corta la luz por una reparación o inclemencia climática, tenemos señal por una hora y nada más», explicó Victor Molina, jefe comunal.
La problemática tiene que ver con que los equipos que brindan el servicio de telefonía fija y celular están conectados a la red y no cuentan con baterías de respaldo en caso de una interrupción.
«Hemos tenido problemas cuando se cortó la Ruta 17, por ejemplo, que nos quedamos sin luz bastantes horas y automáticamente sin señal de telefonía celular», recordó.
Los robos de las baterías que cumplirían justamente esa función de apoyo, se han multiplicado. A la empresa Claro le sustrajeron una y a Telecom, dos. En su momento fueron repuestas pero la delincuencia nuevamente volvió a hacer lo suyo.
Molina contó que son equipos de gran porte, nada fáciles de extraer. Para solucionar la situación, la comuna realizó una presentación en la central de Telecom pero no tuvieron respuestas.
Por otro lado, la diputada Soledad Carrizo dejó asentado su compromiso para poder resolver las dificultades que esto ocasiona.