AUDIO | Claudio Luna, Secretario gremial de AOITA
La situación de los chóferes de transporte interurbano es «crítica». Tras 93 días de paro no hay arreglo a la vista y los sueldos atrasados se siguen pagando a cuentagotas. Los chóferes señalan su intención de alcanzar un acuerdo pero explican que ni las empresas, ni el Gobierno de la Provincia de Córdoba están interesados en reactivar el servicio.
El conflicto comenzó en abril cuando no se depositaron a tiempo los sueldos de marzo, desde entonces no hay solución.
«Sin querer esta medida ha sido funcional. Esto beneficia al Gobierno por una cuestión sanitaria. Es obvio que la provincia no quieren transporte y el empresario esta cómodo porque cobra los subsidios sin gastos operativos», explica Claudio Luna, Secretario gremial de AOITA.
Detrás de estos intereses en pugna hay 4200 familias afectadas. Muchos trabajadores están recibiendo asistencia alimentaria para el día a día:
«Los depósitos que recibimos son esporádicos e insuficientes. El trabajador del transporte interurbano ha perdido la dignidad, no puede llevar un plato a la mesa», agrega Luna.
El transporte deberá reformularse cuando regrese, antes de la pandemia era habitual ver hacinamiento, disminución de frecuencias y aumento frecuente de tarifas. Estas variables deberán revisarse junto a los protocolos que exijan la «la nueva normalidad». «Hay que analizar que tipo de transporte quiere el gobierno para los usuarios», señala el referente gremial.
«Acá el que no ha puesto nada es el empresariado. La pandemia la vamos a terminar pagando los trabajadores», sintetiza Luna.
NOTAS RELACIONADAS
- Interurbanos | Preocupación por el futuro de las empresas y los recorridos en el interior
- Sin arreglo a la vista, se cumplen 85 días sin transporte interurbano
- Interurbanos | Sin acuerdo, el paro cumple un mes