Durante el fin de semana pasado, al cabo de varios controles, los inspectores de la Municipalidad de Jesús María secuestraron un total de 24 motovehículos por falta de documentación, casco protector, licencia vencida, alcoholemia positiva y escapes ruidosos.
De ese total de unidades, en la mitad de los casos el motivo del secuestro fue por generar ruidos molestos en la vía pública, mediante aceleraciones y las clásicas “explosiones” en los caños de escape.
«La problemática general de los motovehículos, y particularmente el tema de los ruidos molestos, reconocen un origen común: el desprecio de los conductores hacia las normas de seguridad (propia y colectiva) y también hacia las reglas mínimas de convivencia», señaló en un comunicado la Municipalidad de Jesús María.
A mediados de 2017 se destruyeron 150 caños de escape adulterados, provenientes de motovehículos secuestrados.
“Es casi un absurdo que tengamos que dedicar tanto tiempo y recursos para combatir este flagelo, pero parece que hay gente que no está dispuesta a facilitar la convivencia y se empeña en molestar a los demás vecinos. Vamos a seguir con esta política, para garantizar que en las calles se pueda circular con tranquilidad”, señaló el Secretario de Gobierno, César Seculini.
Otros controles
También se secuestró una camioneta, por alcoholemia positiva de su conductor, y un remis, por licencia vencida.
A su vez, los controles continuaron el martes, en Ingeniero Olmos y Córdoba, y en Almirante Brown y Lavalleja, donde se retuvieron otras 9 motos por falta de documentación.