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Belén Cresta contó detalles del momento en el que pudieron hacerle llegar al papa francisco uno de los ponchos que los identificó como indumentaria durante la Jornada Mundial de la Juventud Cracovia 2016.
El atuendo celeste y blanco fue el elemento elegido para obsequiar al sumo pontífice tras haber pasado más de una hora cantando las residencias destinada para los cinco días que duró el encuentro.
“cuando hacía más de una hora que estábamos saltando y pidiendo que Francisco se acercara, llegaron tres sacerdotes cercanos a él y nos dijeron que no bajaría porque dormía, sin embargo nos dejaron enviar un presente.” Explicó Belén, quien agregó que escribieron una nota y sus teléfonos para confirmar la recepción del regalo.
Al otro día mientras viajaban en trolebús el Padre Román Balossino, quien guía a estos peregrinos locales , recibió el llamado del padre Roberto quien aseguró que el poncho llegó a las manos de Francisco quien lo agradeció enviando las bendiciones correspondientes a grupo de peregrinos locales.
En la comunicación telefónica se escucha al vocero decir “el Santo Padre recibió este regalo vuestro de ayer, esta mañana con una gratitud y gran alegría, y les manda sus bendiciones “
Ya en el 2013 en Río de Janeiro lograron acercar otro poncho y el mismo Papa se quitó el solideo para colocarse otro que le acercó el mismo grupo de jóvenes. En ese momento el papa se lo colocó lo besó, bendijo a los jóvenes y les devolvió a través de un custodio el famoso solideo.