Con acertados temas de Revolución , Sueño Dorado y Abel, quien vendió un millón de copias de su reciente trabajo convirtiéndose a unas semana del lanzamiento en doble disco de platino, Abel volvió a apropiarse de los sueños de sus seguidores.
Con su cálida interpretación, su voz única y su entrega de siempre, deja en la piel y el corazón la sensación de un comienzo abierto esperando más de quien parece no tener techo a la hora de crear.
No hubo canción que no corearan, nada se dejó sin aplaudir.