Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

DÚO HERENCIAS | La historia de un padre y un hijo unidos por el amor al Folklore

Sergio y Juan Cruz Giménez nacieron en Sinsacate pero hace años que viven en Sarmiento. Sergio es remisero en Jesús María y Juan transita sus últimos años en la escuela primaria. La tradición, el amor por la música y la familia, los llevó a conformar una banda nacida debajo de un árbol de mora, un mate, una guitarra criolla y el amor por el folklore. Aquí, su historia...
Compartilo con alguien:

Sergio Giménez tiene 40 años, trabaja de remisero en Jesús María, pero su pasión está en otro lado: la música. Es así que junto a su hijo Juan Cruz, de once años, hace un tiempo se miraron a los ojos y descubrieron una pasión compartida: el folklore.

«Tatu», como le dicen a Sergio, se dio con que Juan Cruz poseía una voz especial, angelical, conmovedora, que no se oye todos los días, y decidió que era imposible privar al mundo de ese regalo: «Hace llorar a las maestras en la escuela», confiesa con los ojos llenos de orgullo al recordar los actos escolares en los que Juan es el protagonista absoluto.

Juan, el cuarto de cinco hermanos (Sofía, Manuel, Valentina y Aylén), tímido al principio pero pícaro sobre el final, mira a su padre con dos pupilas llenas de destellos, soñando algún día ser como él. Al preguntarle qué quiere ser cuando sea grande, responde: «Como mi papá».

HERENCIA 2

La vida les ha permitido consolidar una gran familia en la que los hermanos, los primos, los abuelos y amigos, son indispensables y mencionados permanentemente, como pilares de crianza, aprendizaje, oportunidades y transmisión de valores.

Fue debido a las mil y una manos que les dieron, que este sueño se convirtió en una realidad y hoy, juntos, padre e hijo, transitan un pentagrama de ilusiones, en el cual los dos danzas embelesados por el talento mutuo y la alegría de haberse encontrado en este camino, que aún es incierto, pero que lo hacen humildemente al andar.

«Dúo Herencia». El nombre les llegó el mismo día que lograron concretar su presentación oficial en público en los estudios de Radio Jesús María, empujados por los vecinos, motorizados por las ganas, y decididos por la oportunidad.

«Bien, Juan, somos tus fans», «Fuerza y a seguir adelante. Son una familia muy humilde y se lo merecen», «¡Qué voz maravillosa la de ese niño! ¡Que cante, que cante!» se replican los mensajes que llegaron a la Radio Jesús María cuando el flamante Dúo Herencia hace sonar los primeros acordes de la guitarra y Juan Cruz levanta su voz de pequeña golondrina.

Al soñar con un escenario, lo primero que se les viene a la mente es pensar en su Sinsacate natal, previo a mencionar Jesús María o Cosquín, por su ambición radica en el anhelo de compartir su música a la par de un pan casero, un arrope de tuna y una zamba… debajo de ese mismo árbol de mora que hoy los acoje, compartiendo un mate, una sonrisa, una canción.