La localidad de Quilino se vio sacudida por los fuertes vientos del último fin de semana, que causaron destrozos, caída de árboles y la muerte de un joven de 25 años. Sin embargo, la preocupación no solo gira en torno a las consecuencias del temporal, sino también a la falta total de prevención por parte de las autoridades.
Adriana Magnan, comunicadora de la zona, expresó su indignación por la ausencia de alertas oficiales. “En Quilino nadie informó esa alerta. Defensa Civil no comunicó nada. Si bien en redes sociales algunos se enteraron, no todos están conectados permanentemente. Era su deber avisar”, señaló.
Según relató, la situación se tornó especialmente peligrosa a la salida de los boliches, que funcionaron con normalidad pese al riesgo. “Hubo gente que salió del boliche sin saber lo que se venía. Los vientos eran impresionantes, no se veía nada. Una víctima iba en moto, y otro joven que intentó ayudarlo resultó con quemaduras por un cable caído”, explicó.
Magnan también denunció que el árbol que causó la tragedia, un pino de gran porte, había sido reclamado reiteradamente por la familia ante el municipio, la cooperativa y los bomberos, sin obtener respuestas. “Hace tiempo que pedían que lo cortaran. Nadie escuchó”, dijo.
“Lo que más duele es que esto se podría haber evitado. Si se hubiese dado la alerta, si no abrían los boliches, si hubiesen escuchado los reclamos por el árbol”, concluyó Magnan, haciendo eco del sentimiento de impotencia que recorre a muchos vecinos de Quilino.