Cansados de los delincuentes, vecinos de la localidad del norte cordobés salieron a las calles para visibilizar la problemática.
«Se ha perdido la tranquilidad en el pueblo, está jodido la cosa», afirmó Leopoldo Navarro, uno de los convocados que pidió respuestas a las autoridades.
La gente aseguró que, en muchos casos, conocen a los ladrones pero la justicia no avanza con detenciones.
Leopoldo remarcó que «la policía no alcanza y hay una ausencia del Estado, no están trabajando coordinadamente». Según narró, días atrás, un jefe policial inició reuniones barriales pero sorpresivamente dejó su cargo.
Además, los vecinos recordaron a Leopoldo Dante Suárez, de 52 años. El hombre falleció hace tres años cuando un grupo de presuntos ladrones ingresaron a su casa para robar.
«Ya no existe en mi pueblo una persona que no tenga un amigo o un hermano que no haya sido asaltado, con entraderas o robo de todo tipo», afirmó.