El pasado martes 6 de septiembre, entre las 19:30 y 20:30 horas, el joven iba por calle Córdoba. Un auto negro estacionado abrió de repente la puerta, provocándole una fuerte caída.
«Mi hijo se golpea en la puerta, cae al piso y se revienta toda la cara. Como pudo, solo se levantó porque el auto cerró la puerta y se fue», narró Natalia, su mamá.
Tomás fue con su amigo quien lo acompañó al hospital. «Parecía que era todo superficial hasta que después le hacen una tomografía y le da que tiene un coagulo en la cabeza entre el cerebro y la frente», explicó.
Un profesional lo analizó y sigue de cerca la evolución del coágulo que, por ahora, no es necesario operar. Por 30 días debe cuidarse tras pasar varios días en terapia intensiva y luego evaluarán cómo seguirá su vida que ya cambió según su madre.
La familia pide ayuda para dar con el paradero del conductor o conductora. Ante cualquier dato, pueden comunicarse al 3525-614925.