AUDIO | Agustín Domínguez, encargado del gimnasio.
Una modalidad delictiva despertó la preocupación entre los asistentes de un gimnasio ubicado en calle Yadarola de Jesús María.
Todo comenzó cuando un hombre pagó el día y tomó una clase para entrenarse solo. Según el testimonio del encargado del lugar, Agustín Dominguez, este joven actuaba de manera sospechosa: miraba las cámaras de seguridad y divisaba las pertenencias de las personas que estaban en el gimnasio.
Finalmente, sustrajo dos teléfonos celulares que estaban a su alcance y escapó rápidamente del lugar. Tal es así, que olvidó su bolso que había dejado colgado en los percheros.
Tras percatarse del hecho delictivo, los encargados del gimnasio analizaron las imágenes de las cámaras, detectaron el modus operandi y revisaron el bolso, en su interior, había dos boletos de colectivo, un urbano de Córdoba y otro Ersa (con recorrido desde la terminal de Córdoba hacia Jesús María) que había sido tomado a las 17 horas. También había una fotocopia de DNI con nacionalidad venezolana.