AUDIO | Juan Manuel Garzón, Investigador de IERAL / Fundación Mediterránea.
«Este año el sector se ha pegado un piñón, chocó contra un camión de frente, que es la sequía», señala a Radio Jesús María el investigador de IERAL / Fundación Mediterránea, Juan Manuel Garzón.
El norte de Córdoba ha sido uno de los sectores más afectados por la falta de lluvias. Las consecuencias trascienden las cosechas actuales para ya marcar una situación crítica para el futuro de la la ganadería, dadas las escasas pasturas.
Para Juan Manuel Garzón la sequía, las langostas, el granizo, las malezas resistentes, el enojo de los consumidores ante los aumentos de precios e inflación, una economía poco pujante y la presión fiscal constituyen un panorama preocupante para las mujeres y hombres de campo:
«No se advierte en los centros urbanos todos los factores de riesgo que enfrenta la producción agrícola (…) muchos productores van a quedar golpeados principalmente lo que alquilan campos (…) el hombre de campo sabe que son riesgosos estos años malos», señaló el disertante.
Garzón estima que los ingresos menguados de los productores repercutirán en otras actividades económicas.